"... Y así fue: muchos años guardaron el templo hasta que, gastados por el tiempo, Baucis vio a Filmón cubrirse de follajes y Filemón vio como el follaje cubría a Baucis. Juntos dijeron: Adios, esposo; y la corteza ocultó sus bocas. Filemón y Baucis se convirtieron en dos árboles: una encima y un tilo. No vencieron al tiempo, se abandonaron a su curso y así lo transformaron y se transformaron".
Octavio Paz, La Llama doble: Amor y erotismo. 1993.
Aprendiz a lo largo de la vida.
Gracias por entrar, este es un blog de libre expresión.
No hay comentarios:
Publicar un comentario